Franz Westen vive, rodeado de sus libros y revistas, en un apartamento de la ciudad de San Francisco y se gana la vida escribiendo relatos de fantasía y ciencia ficción para las revistas populares del género. Franz se está recuperando de un período de alcoholismo que sufrió tras la prematura muerte de su mujer y, poco a poco, va redescubriendo la vida cotidiana.
Una mañana, al contemplar el monte que domina la ciudad con unos gemelos, cree distinguir en varias ocasiones una silueta extraña. La curiosidad le impulsa a visitar el lugar, pero no descubre nada de particular... Hasta que lo inesperado se presenta desde la dirección más insospechada. Westen se encontrará abocado a un proceso cada vez más obsesivo que gira en torno a las teorías de Thibaut de Castries, un ocultista convencido de que las ciudades tienen vida propia.
Westen llega a descubrir un manuscrito de Clark Ashton Smith que le pone sobre la pista de nuevas y estremecedoras implicaciones de las teorías defendidas por De Castries, viéndose cada vez más envuelto en ellas.