Cuenta la leyenda que en el peñón del Diablo habitan sirenas preciosas que, en días soleados, se tumban en las rocas, pero que aquellos que se acercan demasiado a ellas no vuelven. Puede que solo sean cuentos de marineros borrachos, pero lo que sí es cierto es que se avecina un buen temporal y el farero, Tomas Hardy, no ha encendido el faro esta noche. El alcalde ha intentado contactar con él, pero no da señales de vida, así que os ha encomendado la misión de comprobar el estado de Hardy y encender el faro a toda costa… si podéis.
