Prefacio del autor (2013)

Descubrí a H.P. Lovecraft tras leer El color que surgió del espacio a los diez años de edad; y tan profundamente me inquietó y emocionó que años más tarde, ahondando más en su ficción, encaminé mi temprana afición a la escritura hacia los Mitos de Cthulhu. Pergeñé cinco cuentos en nueve meses; no eran más que pastiches amateur de los originales, pero tuve el suficiente valor para mostrárselos a August Derleth, y de no harme animado él a perseverar a pesar de su escasa calidad, hoy seguirían siendo meros borradores.

Más importante aún, me convenció de que la región de Arkham estaba agotada como escenario para historias de los Mitos, y de que una nueva hubicación para estas podría ser Gran Bretaña; estaba seguro de que el mismo Lovecraft aprobaría una nueva serie de relatos ambientados allí. Consideré el valle del Severn como lugar probable. Con entusiasmo contenido empecé a crear mis propias localidades.