La bailarina rota (2022)

Terror sobrenatural actual

Aunque la historia se remonta en el pasado, esta aventura está ambientada en la actualidad, en un comienzo de verano de 2020. Los acontecimientos les llevan a vivir su propia historia de terror de fantasmas, casas encantadas y secretos familiares, sin olvidar la influencia de los Mitos. Llegados a este punto hay que decir que, aunque los Mitos están presentes, La bailarina rota no es una aventura clásica para La Llamada de Cthulhu. Sí comparte muchos elementos: misterio, terror, investigación, una población pequeña, una zona rural, un caserón, terror sobrenatural y, como ya se ha dicho, la presencia oculta de los Mitos.

La bailarina rota, a lo largo de cuatro actos, muestra que, tras el velo de lo aparente se oculta una desgarradora historia que atará los corazones de los personajes jugadores y no los soltará hasta que decidan su destino. Una casa de perdición; espíritus extraños, ecos de un pasado oculto; objetos de perdición cuyo uso puede salvarte o matarte; hospitales e instituciones mentales en donde el misterio aguarda ser descubierto; luces y sombras de las creencias que obsesionan el alma; decisiones con las que vencer puede significar sufrir, y rendirse a la corriente puede ser un dulce sacrificio. Esto tiene lugar en el condado de Breskshire, al oeste del estado de Massachusetts. Allí, en el aparentemente tranquilo paraje rural de West Stockbridge, los personajes se sumergirán en la terrible historia de una residencia en un lugar idílico: Galway House.

Secretos ocultos gritan desde la oscuridad

La historia de Galway House es la historia de la familia Galway. Una familia descendiente de colonos irlandeses del 1700 quienes, durante finales del s. XIX, ganaron en riqueza y esplendor en el condado de Berkshire hasta que, durante casi el primer tercio del s. XX, dominaron la región como prácticamente sus dueños.

Pero algo ocurrió en las décadas venideras. Por un lado, la Gran Depresión golpeó fuerte las decisiones de la familia. La decadencia fue arrancándoles posesiones, negocios y terrenos hasta quedar tan solo con la finca familiar. La Galway House sobrevivió como marca del pasado esplendor de la familia. Pero no fue lo único que sobrevivió.

Los sentimientos enconados, los terribles secretos escondidos tras gruesas cortinas, los miedos y el sufrimiento de una familia marcada por la desdicha marcaron el lugar para siempre. Porque hay horrores que no pueden ser contados. Son escondidos en una caja de madera y olvidados en la oscuridad.

¿Podrá tu mesa de juego comprenderlos?

Atrévete a pasar una noche en Galway House

El comienzo del verano conjuga una fecha señalada a través de los tiempos. Un momento en el que lo mundano y lo que hay más allá se acercan. Pero, cuando se alinea con el firmamento, terrores antiguos y modernos se fusionan para golpear nuestras almas.

La leyenda negra de Galway House reta a los incautos a ir a ella para resistir los miedos propios. A veces no es más que un ruido sordo en un rincón. Otras es una sombra lateral que se mueve al parpadear. Tus miedos pueden jugarte malas pasadas. Porque no es más que eso, ¿verdad? Una leyenda para asustar a niños y turistas.

Sin embargo, tarde o temprano, no serán vuestros propios miedos quienes os sobrecogerán. Sino vuestros propios deseos. Pugnarán con vuestra voluntad, retorcidos frente a la visión de la Sombra.

Un misterio familiar que os sorprenderá

A lo largo de la trama, «La bailarina rota» consigue que lo que parece una nueva esperanza se convierta en un peligroso regalo. A lo largo de sus escenas, juega con la tensión en metajuego con la expectativa y los dilemas sobre la moralidad. ¿Llegarán los personajes jugadores al fondo de este misterio? ¿Sobrevivirán a los incomprensibles peligros? ¿Qué ocurre cuando la vida que te han contado muestra las mentiras de un espejo sin fondo? ¿Qué harías si parece que tu realidad parece atada a un destino que no te pertenece? ¿Qué harías cuando todo parece desmoronarse entre tú y tus seres queridos? ¿Qué elegirías sacrificar si lo que se interpone entre el terror y la felicidad eres más tú mismo (o eso crees)?

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